Crece la preocupación por la salud del papa Francisco
Según el comunicado oficial, la crisis fue prolongada y requirió el uso de oxígeno a altos flujos.
Además, el papa recibió transfusiones de sangre debido a un cuadro de anemia. Aunque se mantiene alerta, los médicos informaron que está más adolorido que en días anteriores y su recuperación aún es incierta.
El Vaticano señaló que Francisco no corre riesgo de muerte inmediata, pero su estado sigue siendo delicado.
El cirujano Sergio Alfieri explicó que el tratamiento contra la neumonía tomará tiempo y que el papa permanecerá hospitalizado al menos una semana más, bajo estricta observación médica.
Debido a su delicado estado de salud, el pontífice no pronunciará el Ángelus dominical, siendo la tercera vez que se ausenta en sus 12 años de papado. A pesar de las dificultades, mantiene el buen ánimo, sigue comiendo con regularidad y continúa con actividades laborales desde su habitación en el hospital.